Después de llevar a cabo dos talleres de «micromachismos» para hombres desde la Comisión Feminista de Sol en Mayo de 2011, los participantes decidimos poner en marcha un espacio para darle continuidad al trabajo que estábamos realizando. Entendemos que es necesario que los mozos, los chicos, los hombres, los niños, los mayores y todo cuerpo socializado en masculino debería de hacer una labor decon…structiva de su ser/estar, debería de analizar-se como cuerpo con privilegios en una sociedad fuertemente patriarcal y heterosexista. Las relaciones que mantenemos con otros compas, las que mantenemos con nuestras compas de lucha política, con nuestras amigas, colegas, parejas, etc..están mediadas, nos guste o no, por relaciones de poder que se dan de manera «natural» en muchos de los casos, es por ello que nos cuesta reconocernos como figuras que ejercen ese poder sobre las personas que queremos y sobre las que no. Además, creemos que el destrozo planetario viene dado, en gran medida, por una mirada masculina del mundo, desde la que se prioriza el resultado (la acumulación) y se invisibilizan y menosprecian los procesos.
Las líneas que queremos seguir son dos: Una hacia dentro, como comentábamos, consistente en mirarnos desde una perspectiva de género y relacional, donde podamos identificar qué partes de nuestro sentir están directamente relacionadas con una forma masculina y por tanto cultural de mirar el mundo, y en qué manera afecta eso a las personas con quien nos relacionamos. Nos gusta hablar de «violencias invisibles», microviolencias, violencias simbólicas, psicológicas y prácticas que ejercemos en el cotidiano. La otra línea de trabajo es hacia fuera, intentando que este interés se extienda y se entienda como una parte inseparable del «hacer la revolución», porque sí creemos que la revolución será feminista o no será, y que para ello tiene que haber un autoreconocimieto de los varones como engranjes del sistema de dominación masculina, es decir, como partes activas de ese sistema, y como tales, co-responsables de su perpetuación.
Queremos dejar claro que los feminismos somos todxs, que hay hombres blancos y heterosexuales que luchamos contra nuestra condición problematizando nuestra forma de sentir, de pensar y de relacionarnos porque entendemos que, en muchos de los casos, es nociva para una convivencia en igualdad.
Oleee k waposssss!!!
Gracias por venir y compartir vuestra experiencia y sabidurias