Recientemente me entrevistaron en el programa de 1mySolution, de Radio Kanal Barcelona, un programa dirigido a las pymes y el mundo del emprendimiento. En el programa hablamos sobre nuestra asociación Pedernal Educación y Tecnología y nuestras actividades de formación en comunicación especializada en ONG y prevención de riesgos en Internet. Además de escuchar el podcast, también dejamos la transcripción de algunas de las preguntas.
Servicios que ofrecéis
Desde la parte de formación ofrecemos cursos sobre los siguientes temas:
- Por un lado, comunicación especializada en el Tercer Sector, como nuestro curso de Community Manager para organizaciones sociales, que aterrizaje esta figura profesional en el mundo de las ONG
- Y, por otro lado, también ofrecemos cursos sobre educación y tecnología, como es el caso de nuestras formaciones sobre prevención del ciberacoso.
Con respecto a nuestros servicios de desarrollo y diseño web estamos especializados en el gestor de contenidos WordPress y la plataforma de e-learning Moodle.
Además, de forma más puntual, ofrecemos asesoramiento, acompañamiento en el desarrollo o implementación de planes y estrategias de comunicación o participamos de jornadas en los temas que hemos comentado anteriormente.
Barreras de la tecnología en la educación
En el mundo educativo hay una falta de cultura digital crítica y creativa generalizada. Al mismo tiempo que se han realizado inversiones en tecnología para modernizar el sector educativo, nos encontramos (salvo algunas experiencias innovadoras) con un uso tradicional de la tecnología, y se usa la pizarra digital como un proyector o los ordenadores y tablets como un libro clásico. Esto genera una falsa impresión de innovación educativa.
Por lo general vemos que hay una resistencia al cambio y una falta de formación permanente en el sector educativo. En realidad, no es algo que se muestre sólo en el ámbito tecnológico. Gran parte del colectivo docente muestra preocupación por la ausencia de tiempo para llegar al final de sus programaciones, sienten la presión de la inspección, las familias y sus equipos directivos, se enfrentan a un alumnado cada vez más complejo y heterogéneo… y el ámbito tecnológico es otro aspecto más que añadir a esta complejidad.
Al mismo tiempo el profesorado se enfrenta a una situación donde la escuela ya no es el lugar donde está todo el conocimiento, ya que éste se puede encontrar en Internet cuando uno quiera. Por tanto, el profesorado, tampoco son las personas que tienen dicho conocimiento y eso dificulta que sean las figuras de referencia del alumnado. Sin embargo, las escuelas, podrían ser el mejor espacio donde los/as educadores/as fueran la guía para facilitar el intercambio y análisis de conocimientos, se filtre la información y se establezcan prioridades, y se inculquen valores para una mejor convivencia.
Por último, una parte importante del profesorado se siente incapaz de educar en un ámbito en el que creen que saben menos que sus alumnos. Las personas adultas pensamos que el ámbito tecnológico nos supera, mientras que para los más jóvenes suponen un terreno donde se mueven con confianza y soltura. Y, por eso, podemos caer en el error de pensar que no podemos educar en un ámbito que ellos dominan. Desde Pedernal creemos que esto es un mito que debemos romper. Los menores, a través de la autoexploración de herramientas tecnológicas concretas, sólo saben un tipo de uso de las TIC. Pero desconocen muchos conceptos básicos y el funcionamiento complejo de muchas de las herramientas que usan. Sin embargo, por poner un ejemplo, no nos hace falta saber de mecánica del automóvil para enseñar educación vial. Tampoco el no ser ingenieros medioambientales nos impide enseñarles a respetar la naturaleza. Esto es así porque nuestra labor pedagógica se basa en la educación de unos valores y pautas educativas generales. ¿Por qué hemos llegado a pensar que con las TIC es diferente? No es necesario dominar el funcionamiento de las Redes Sociales Online para educar en unas relaciones positivas. Creo que la educación en valores y la capacitación de destrezas técnicas es algo que nos corresponde a las familias y los educadores y educadoras. Puede que actualmente está derivación de nuestra responsabilidad nos haya dificultado que actualmente no sepamos por dónde empezar, nos frustremos cuando hay problemas, no sepamos detectar indicadores de riesgos en las primeras fases, no hayamos desarrollado planes de prevención eficaces… Por eso, urge una nueva concienciación y formación en este ámbito para recuperar esa responsabilidad educativa.
Brecha digital (qué es importante para superarla)
La brecha digital se refiere a la separación que existe entre personas que utilizan las TIC de forma cotidiana frente a aquellas que no tienen acceso a las mismas o, que aun teniéndolo, no saben utilizarlas.
Según esta definición hay mucha diferencia en el acceso en función del nivel adquisitivo, y en el conocimiento. Las TIC, que están en constante y rápida evolución, no pueden dejar de ser nuevas, y por tanto, la brecha seguirá acompañando a esa innovación mientras no se adquiera un acceso universal y una cultura digital básica.
Es importante no sólo superar la brecha digital, sino también buscar el apropiamiento tecnológico porque actualmente el acceso a la información y la producción de contenidos digitales supone un campo más de socialización que se cuela de forma transversal en muchos de los ámbitos de la vida de las personas. Si conseguimos un acceso universal y crítico a la tecnología y a la información, al mismo tiempo que sea un acceso sostenible con el medio ambiente, podremos al menos contribuir a evitar pautas de exclusión o romper algunas barreras. Un buen uso de las TIC de forma crítica y desde una cultura digital básica compartida, nos ayudará a realizar una lectura crítica de la información, buscar unas relaciones más sanas entre las personas y no sólo acceder a una mayor cultura sino también producirla.
Por qué surge la asociación
Ante la situación descrita en las preguntas anteriores, Pedernal surge por la preocupación de sus integrantes de ayudar dentro del sector social y educativo a afrontar los problemas derivados de un mal uso de la tecnología desde un enfoque crítico, preventivo e integral.
En ese sentido, las personas que formamos la asociación nos proponemos fomentar el uso crítico, participativo y democrático de la tecnología y trabajar por superar la brecha digital para alcanzar el acceso universal a la información, rompiendo barreras económicas, tecnológicas, de conocimientos, etc.
Por tanto, nuestra entidad no sólo surge para superar los malos usos, sino también para establecer pautas y habilidades para un uso en positivo de las TIC.
Valoración de las leyes de protección del menor en Internet
El ámbito legal en general siempre va por detrás de lo que ocurre en la sociedad. Esto se acentúa más en un terreno como las TIC, que están en constante cambio y evolución.
Por otro lado, las leyes carecen de un trabajo concienciador y educativo de prevención. La legalidad actúa de forma individual y tras haber surgido un problema. Se trata de un modelo de intervención reactivo con una incidencia puntual. Sin embargo, los problemas derivados de un mal uso de las TIC tratan de algo generalizado y estructural, que sólo puede trabajarse desde una labor educativa permanente y a través de una intervención social y comunitaria.
Por esto, pensamos que las leyes actuales en materia de protección infantil se demuestran insuficientes y se debe dar prioridad a modelos de prevención educativos basados en una convivencia proactiva y que incluyan a todos los agentes de socialización de los menores.
Pautas de vuestro modelo de prevención de riesgos en TIC y menores (para evitar acosos)
Nuestra intervención podría encuadrarse dentro de un modelo Ecológico y Sistémico donde se concede una gran importancia a las relaciones sociales y influencia del entorno y cómo las personas se ven afectadas por el ambiente y la cultura.
Creemos que es de vital importancia la influencia del contexto en los procesos de socialización y construcción de la personalidad de la infancia. Por tanto, se hace necesario comprender dicho contexto y los agentes que se interrelacionan en el mismo para poder realizar una labor de prevención integral. La prevención de riesgos derivados de un mal uso de las TIC como es el ciberacoso exige el compromiso de todos los agentes de socialización, sobre todo el profesorado, la familia y el propio grupo de menores.
Por tanto, nuestra propuesta e intervención busca planificar diversas actuaciones a distinto nivel en función de los diversos agentes que intervienen en la socialización de las personas.
Al mismo tiempo, buscamos una intervención que cree condiciones para una convivencia en positivo. En nuestra labor de prevención, buscamos huir de las propuestas de intervención que se centran en actuar tras haber surgido un problema. Actualmente existen muchos protocolos de intervención cuando se detectan casos de acoso, pero creemos de vital importancia actuar antes creando entornos y relaciones sanas que eviten los posibles problemas.
Aunque cada vez más se están explorando nuevas vías de intervención más acorde con nuestros planteamientos, el modelo de intervención principal sigue siendo reactivo y centrado en el alumnado “conflictivo”. Sin embargo, creemos que para una verdadera prevención de riesgos se debe trabajar la competencia emocional, social, ética y tecnológica de todos los individuos.
Prevención de datos personales
La privacidad de nuestros datos personales es otro de los aspectos que pueden verse vulnerados si no adoptamos una postura crítica en el uso de las TIC. Muchas de las herramientas actuales como las redes sociales, los programas de mensajería instantánea tipo Whatssap o los dispositivos móviles nos permiten compartir imágenes privadas, datos personales o nuestra localización.
También es uno de los aspectos en el que debemos educar y establecer pautas de prevención como no compartir datos personales (especialmente aquellos que sean de mayor sensibilidad como dirección, números de cuenta, dni..), usar constraseñas robustas y no compartirlas, tener cuidado con los puntos de aceso wifi públicos, cerrar nuestras sesiones en los ordenadores donde naveguemos, navegar de forma privada en determinados casos, valorar usar Nick o nombres de usuarios falsos en algunas ocasiones, mantener tapada nuestras webcams, deshabilitar la geolocalización de nuestros dispositivos móviles cuando no sea necesario… éstos son sólo algunos ejemplos generales en éste ámbito.
Papel de las familias, profesores… ante los riesgos que suponen las nuevas tecnologías
Con respecto a la familia, es el primer y uno de los principales agentes de socialización de los niños y niñas. Sin embargo, el rápido avance tecnológico y la brecha digital que se ha generado, ha propiciado que los padres y madres vean las TICs como un ámbito sobre el que no “saben” intervenir. Esta visión ha contribuido a crear una falta de responsabilidad educativa y preventiva por parte de los padres y madres.
Esta derivación de la responsabilidad ha propiciado que los menores se lancen al uso de las TIC desde el autodescubrimiento. Esta exploración sin acompañamiento no es necesariamente negativa, pero sí ha contribuido a la generación de algunas pautas y dinámicas de riesgo.
La falta de una concienciación adecuada en las familias, y la capacitación de estas en habilidades y estrategias, hace que los padres sean poco eficaces en los niveles preventivos o en la detección de indicadores de riesgos en las primeras fases de los problemas derivados de un mal uso de las TIC (al igual que hemos descrito en el ámbito escolar). Al mismo tiempo, cuando las familias son conscientes de la problemática o surgen casos concretos de ciberacoso o violencia en la Red, es común no saber por dónde empezar y generar situaciones de estrés y frustración. Es común que se produzcan respuestas de rechazo hacia la institución escolar y el profesorado (mientras que antes no se ha manifestado una voluntad de colaborar en la prevención desde ambas partes), prohibición en el acceso a la tecnología, medidas punitivas y de control… Todo ello desde un enfoque reactivo que ya hemos afirmado que se demuestra ineficaz.
Por eso es necesaria una nueva concienciación y formación en este ámbito, para recuperar esa responsabilidad educativa. Esta labor educativa en la prevención de riesgos no consiste en dominar el aspecto técnico de las TICs, sino en adquirir una cultura digital básica que permita a las familias educar en valores para una convivencia en positivo y la capacitación de destrezas y habilidades para que el menor adquiera una responsabilidad y autocontrol en el uso de las TICs. Algunas pautas educativas encaminadas a esa labor podrían ser:
- Fomentar la comunicación y el diálogo.
- Ser un referente positivo. A menudo l@s adult@s somos un ejemplo negativo en cuanto al uso de las TIC, pasamos mucho tiempo delante de las pantallas o usamos el Smartphone en horarios inapropiados. Esto debería hacernos pensar a l@s adultos sobre el papel como modelos de referencia para los menores y nuestra coherencia de cara a establecer pactos y normas.
- Establecer pactos y normas razonadas con el/la menor en cuanto a horarios de usos de las TIC, tiempos de conexión, puntos de acceso a Internet… Las normas y límites desde un estilo educativo democrático son imprescindibles para que el menor crezca con un buen equilibrio emocional y con confianza. No infundir a l@s menores un miedo injustificado hacia las TIC o, por el contrario, una visión romántica. Se trata de transmitir una visión crítica, reconociendo las ventajas pero también los riesgos.
- Trabajar en colaboración con el centro escolar y mantener comunicación con otros padres y madres.
- Mantener una actitud de formación permanente ya que las Nuevas Tecnologías están en constante evolución. Una buena iniciativa para esto son las escuelas de padres y madres.
- Llevar a cabo propuestas de ocio compartido con el/la menor en los que las TICs jueguen un papel transversal (y a veces conectando lo online con lo offline): buscar recetas para preparar comidas, uso de aplicaciones para crear rutas en bici, juegos familiares (hay apps para jugar en familia)…
Con respecto al ámbito escolar, éste puede ser uno de los marcos principales de actuación en una educación en y desde la convivencia positiva y un lugar idóneo para educar en un uso crítico y responsable de las TIC. Creo que la educación no debiera sólo buscar la adquisición de conocimientos, sino también formar personas para que puedan llegar a asumir el protagonismo de sus propias vidas y desarrollar habilidades para una correcta resolución de conflictos y la defensa de los derechos humanos. Desde ahí, las instituciones educativas, pueden ser interpretadas como comunidades de convivencia.
Creo que el reto desde las escuelas es múltiple. Por un lado, se deben revisar los fines, prácticas y metodologías educativas que puedan constituir formas de reproducción social de las causas de la violencia estructural y frente a esto desarrollar un modelo de convivencia en positivo y, por otro lado, desarrollar planes de prevención de riesgos en el uso de las TIC fomentando un uso responsable y crítico de las mismas.
Este trabajo preventivo se puede desarrollar además de una forma participada donde el propio alumnado tenga un papel protagonista. Ya existen algunas experiencias creativas e innovadoras con excelentes resultados tales como grupos de trabajo mixtos (familia, profesores y alumnos) contra el ciberacoso, grupos de mediación entre iguales (donde un grupo de alumnos es formado para identificar problemas y ejercer la mediación), círculos de calidad , proyectos específicos de análisis y reflexión de la problemática como realización de cortos o blogs…
Así mismo, se debe normalizar el uso de las TIC en los centros escolares para que no constituya sólo un ámbito que los menores asocian al entretenimiento, el ocio y el tiempo libre. En este sentido son destacables los proyectos que usan las tecnologías de forma transversal en los proyectos educativos: incorporando el móvil como metodología en el aula, el uso de las impresoras 3D, la enseñanza de lenguajes de programación, el Flipped Classroom, el uso de hardware libre y robótica, la gamificación o ludificación…
Las principales pautas y estrategias son similares a lo que ya hemos comentado: tener una buena comunicación, establecer normas y acuerdos, ser un referente positivo… La ley obliga a las instituciones educativas contar con un protocolo de actuación, pero pienso que sería igual de necesario desarrollar un plan de convivencia que se desarrolle antes de que ocurran los problemas.
Pros y contras de las múltiples herramientas e infoxicación que genera Internet
La infoxicación se refiere a la dificultad de procesar la información de forma crítica y seleccionar aquellos contenidos fiables ante la abrumadora cantidad de información disponible. Es uno de los riesgos derivados de un mal uso de las TIC.
Otros contras derivados de un mal uso podrían ser:
- Riesgos relacionados con acceso a contenidos inapropiados: violencia, pornografía, contenidos xenófobos, racistas…
- Construcción de una identidad digital selectiva narcisista. Sólo se publica lo que se elige pensando en cómo nos verán los demás.
- Riesgos relacionados con la privacidad y los datos personales
- Riesgos relacionados con usar contenidos protegidos por la propiedad intelectual..
- Riesgos relacionados con las relaciones: ciberacoso entre iguales, sexting (envío de material gráfico con contenido sexual entre adolescentes), phubing (aislamiento en momentos colectivos), Grooming (cuando un adulto pretende ganar la confianza de un menor normalmente con fines sexuales)…
- Riesgo de dependencia y tecnoadicciones.
- Riesgos relacionados con la construcción de valores. En las redes sociales se reproducen los valores dominantes en la sociedad, por lo que se refuerzan valores como la violencia, el individualismo, el consumismo, machismo…
- Riesgo de marginalidad y exclusión. Sigue existiendo una brecha en el acceso a Internet y esto puede generar pautas de exclusión en los grupos principales de socialización de los menores como la clase o aula.
Pero también hay muchos aspectos positivos. Desde Pedernal huimos de una visión catastrofista de las TIC y buscamos más un uso crítico y positivo antes que la prohibición y la restricción. Enumeramos sólo algunos aspectos generales que nos parecen positivos y se deben potenciar:
- Procesos de aprendizaje y educativos más motivadores. Las TIC son un ámbito que generan altos niveles de motivación en el ámbito educativo a través de actividades interactivas, juegos…
- Aprender a leer y manejar diversos lenguajes: texto, video, imagen…
- Posibilidad de crear contenido. Los menores pueden generar contenido de calidad en las redes sociales, compartir artículos y noticias… A través de esta generación de contenidos se desarrollan capacidades de lecto-escritura, competencias emocionales, análisis de la información…
- Profundizar en las redes de relación: mantener contacto con amigos, familiares, profesores… Y encontrar personas con los mismos intereses o aficiones. Unas relaciones saludables en Internet pueden ayudar a mejorar nuestra confianza y la autoestima.
- Desde la neurociencia se ha afirmado que internet estimula un elevado número de regiones cerebrales, aumenta la memoria de trabajo y produce una mayor capacidad de aprendizaje perceptual.
- Acceso a mucha información y diversas formas de cultura de forma rápida y barata.
Expectativas de futuro
Nos gustaría seguir creciendo en las dos patas a las que nos dedicamos, la comunicación digital especializada en el mundo de las ONG y la prevención del ciberacoso.
Así mismo, en nuestro trabajo a menudo nos encontramos con personas y colectivos que nos enriquecen y tampoco nos gustaría perder contacto con muchas de esas personas y entidades, por lo que también buscamos generar sinergias en nuestra labor. Actualmente tenemos una relación muy estrecha con otras entidades como la Fundación Gestión y Participación Social o la Escuela de Animación de la Comunidad de Madrid.
Y, por último, también nos gustaría encontrar más momentos para seguir profundizando de forma interna en nuestras formas de hacer las cosas y los contenidos en los que formamos, revisar nuestras prácticas, evaluarnos, seguir aprendiendo… para poder ofrecer nuestros servicios con la mayor calidad posible.
