El Neuromarketing es una estrategia de marketing que surge de la aplicación de investigaciones científicas sobre neurociencia y neurobiología aplicadas a la interpretación de los productos publicitarios.
De esta unión entre ciencia y consumismo vemos como la economía, lejos de dar una visión conservadora y tradicional, sabe adaptarse a los avances científicos y tecnológicos. Sin embargo, mucho mas lento, es la adaptación y apropiación de la Educación y del Tercer Sector, ámbitos considerados más avanzados y progresistas.
Mediante técnicas como la Neuroimagen se puede medir como reacciona el cerebro ante estímulos externos, que zonas del cerebro se activan y cuales no.
El Neuromarketing ha terminado de asesinar la verdadera intención de la publicidad, que era mostrar las características que definían cómo era un determinado producto. Sin embargo poco importa cuales sean estas características ante un mercado tan competitivo como el actual. Lo que realmente determinará el triunfo de un producto o marca es si ésta se consigue asemejar de manera inconsciente a determinaos anhelos, deseos o valores.
“Si una empresa encuentra que su marca despierta una respuesta en la corteza somatosensorial, puede concluir que no ha provocado una compra instintiva e inmediata. Aún cuando un cliente presenta una actitud positiva ante el producto, si tiene que probarlo mentalmente no esta instantáneamente identificado con éste…
… lo que muchos denominan el botón de compra, está en la corteza media prefrontal. Si esta área se activa, el cliente no esta deliberando, sino que está ansioso por comprar o poseer el producto. Es un acto intuitivo” (N. Braidot).
Se empieza a considerar ineficaz aquella publicidad que despierte mecanismos de decisión reflexiva y/o consciente. Lo realmente eficaz es aquello que suscita una adquisición del producto de forma impulsiva y automática. ¿Puede ser que estemos indefensos y a disposición de los profesionales de la comunicación persuasiva? Si esto es así es porque han aprendido a estudiarnos mejor que nosotros mism@s. Sólo mediante el conocimiento podremos hacer frente al poder que los mensajes tienen sobre nosotr@s
Se hace necesario una Educación Mediática y Tecnológica, además de otra Educación relacionada con la dimensión emocional, que nos permita dudar y realizar una lectura crítica de los constantes cambios y avances. ¿Quizás también debamos aplicar los mismos principios del Neurociencia a la educación como se ha hecho otras veces con otras teorías científicas (por ejemplo con la pedagogía de la complejidad)?
Bibliografía / Para ampliar:
- Braidot, N. – Neuromarketing, Neuroeconomía y Negocios.
- Damasio, A. – En busca de Spinoza. Neurobiología de la emoción y los sentimientos.
- Jauregui, J. A. – Cerebro y emociones. El ordenador emocional.
- Renvoisé, P. y Morin, Ch. – Neuromarketing. El nervio de la venta.
Articulo: las pantallas, entre la razón y la emoción – neuromarketing