La ventana de Overton, o como la ultraderecha usa la polémica como estrategia de comunicación

Últimamente he escrito varios artículos sobre el auge del fascismo en nuestra sociedad actual, las estrategias y discursos de la derecha para manipular la opinión ciudadana, o como se busca polarizar la opinión ciudadana. Con este artículo me gustaría cerrar esta serie de textos sobre el clima político actual y las estrategias de comunicación basadas en la polémica, el populismo y los discursos de odio.

Recientemente, leí el libro «Antisocial. La extrema derecha y la «libertad de expresión» en Internet», del periodista Andrew Marantz (de la revista The New Yorker). Aunque el libro analiza el ascenso de Trump en EEUU, muchos de sus contenidos son similares a que lo en España estamos viviendo con VOX o el PP. En el libro mencionado, se habla de un concepto que no conocía y sobre el que me gustaría profundizar: la Ventana de Overton.

La Ventana de Overton es un concepto de comunicación política creado Joseph Overton y popularizado tras su muerte por sus colegas de trabajo. Esta teoría política se ha consolidado gracias a Glenn Beck, quien en 2010 lanzó el libro titulado “The Overton Window”. Posteriormente, el Centro de Políticas Públicas Mackinac (fundado por el mismo Overton), publicó éstos videos explicativos.

Esta teoría hace referencia a la ventana de posibles opiniones «aceptables» que se pueden expresar en el espacio público, dentro de lo que el imaginario colectivo podría considerar tolerable. Esta ventana, también incluye un rango de políticas aceptables de acuerdo a un clima generalizado en la opinión pública, sin ser consideradas demasiado extremistas para poder llevarse a cabo o que una organización mantenga el poder.

Por tanto, a nivel político, en ocasiones se busca desplazar o ensanchar la ventana para persuadir o educar al público en propuestas o discursos que de otra forma se considerarían inaceptables. Desde CTXT nos explican como es posible ensanchar la ventana de Overton: Con ideas lo más radicales posibles. Una idea considerada inconcebible puede pasar al terreno de lo debatible cuando aparece otra opinión aún más radical. Algunos análisis explican como gracias a este fenómeno, partidos como Vox han atraído hacia posiciones más radicales a partidos como el PP o Ciudadanos por miedo de quedar como cobardes. Al ensancharse la ventana, los partidos de la derecha van a la pesca de votantes más extremos sin temor a perder a l@s simpatizantes más moderad@s.

Ventana de Overton

La Venta de Overton, también es una forma en la que partidos políticos, lobbys, gobiernos… y cualquier tipo de institución, pueden aprovechar para imponer su agenda de intereses. Es una estrategia relativamente sencilla de llevar a cabo en sociedades más o menos tolerantes (aunque no creo que la tolerancia consista en permitir lo que debe ser intolerable), o donde existe un mínimo de libertad de expresión (que es aprovechada de forma interesada para manipular la opinión ciudadana).

Desde el medio digital RT, nos explican las diferentes etapas que podemos resumir en:

  1. De lo impensable a lo radical. Aprovechándose de la libertad de expresión, se pueden plantear en el debate público cuestiones polémicas. Simultáneamente, se crea algún grupo radical (aunque exista solo en Internet), que será citado por numerosos medios de comunicación. Como resultado, el tabú desaparece y el tema inaceptable empieza a discutirse.
  2. De lo radical a lo aceptable. Se argumenta que si alguna persona se niega a hablar de un tema polémico, será considerado un hipócrita intolerante. Al condenar la intolerancia, también es necesario crear un eufemismo para el propio fenómeno para disociar la esencia de la cuestión de su denominación, separar la palabra de su significado. Paralelamente, se puede crear un precedente de referencia, histórico, mitológico, contemporáneo o simplemente inventado.
  3. De lo aceptable a lo sensato. Se promueven ideas y situaciones donde el tema polémico estaría justificado, mientras que al mismo tiempo, se convierte en enemigo a las personas que se posicionan en contra.
  4. De lo sensato a lo popular. Los medios de comunicación, con la ayuda de personas conocidas y políticos, ya hablan abiertamente del tema polémico, se humaniza a las personas detrás de los compartimentos y discursos polémicos…
  5. De lo popular a lo político. Se empieza a preparar la legislación para legalizar el fenómeno, y los grupos de presión se consolidan en el poder.

En el medio y largo plazo, esta estrategia no sólo vuelve aceptable lo inaceptable, sino que crea un precedente que, o bien prepara y facilita el paso a un siguiente nivel de extremismo, o bien hace más difícil volver a una situación anterior de mayor legitimidad democrática.

Otra consecuencia, es que se pervierte el concepto de tolerancia (o libertad de expresión, o simplemente la libertad), y llegamos a tolerar y justificar lo que debe antes se percibía como intolerable; como nos muestra la paradoja de la tolerancia de Karl Popper: Si una sociedad es ilimitadamente tolerante, su capacidad de ser tolerante finalmente será reducida o destruida por los intolerantes. Para mantener una sociedad tolerante, la sociedad tiene que ser intolerante con la intolerancia. O, expresado en términos democráticos en palabras del científico Jorge Wagensber: Sólo hay una contradicción mayor que la de negar la democracia a los antidemócratas: aceptar que estos acaben democráticamente con ella.

En las redes sociales y en los medios de comunicación, las estrategias que usan los grupos que quieren ensanchar o desplazar la Ventana de Overton, suelen consistir en: realizar propuestas populistas, la promesa de volver a un pasado glorioso y mejor (que es más idealizado que históricamente real), insultar y acosar al contrario, hacerse la víctima, publicar memes ofensivos o con burlas, crear fake news, usar titulares clickbait, justificar la necesidad de una mayor seguridad (que disfraza la intención de un recorte de libertades o promueve el odio hacia otras personas), hacer doxing (publicar información personal de alguien para despreciarle o provocar situaciones de acoso), incluso pagar por anuncios o promocionar contenidos. Lo que se busca, básicamente, es despertar emociones (como la rabia, ira, frustración, miedo…) que lleven a un apoyo sin cuestionamientos y, al mismo tiempo, posicionarse «en contra de». El conflicto crea la atención, y las emociones llevan a la acción.

Si no conocías que es la Ventana de Overton, espere haberme explicado y que gracias a este concepto podamos haber reflexionado sobre el panorama político actual.

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